lunes, mayo 24, 2010

Delirios



Mejores amigos y peores enemigos. Os quiero tanto como llego a odiaros, me parecéis tan bellos y tan repugnantes. Os necesito y deseo que desaparezcáis de mi vida. Imaginaros perecer e imaginaros sonreír. Mi mente, la eterna antítesis. Aborrezco todo lo que amo. Amo lo que aborrezco. Soy cómo la mariposa atraída por la luz, la luz que la mata. Me irritáis, sois una fría y cruel daga de la que no puedo prescindir.
A tu lado me marchito lentamente, a tu lado no soy más que una desvanecida sombra que trata de materializarse pero que se queda anclada en un letal espejismo. Eres el moho más putrefacto que se esconde tras unos deslumbrantes pétalos de luz. Pero el humo, cuál ácido, te corroe y consume.. pronto arderás. Y sé que yo lameré tus lágrimas y me las tragaré, y de nuevo, me quedaré con tu amargura mientras tú huirás volando.

sábado, mayo 15, 2010

Hope there's someone
Llueve llueve llueve. La lluvía me vuelve melancólica, suele hacerme soñar y anhelar lo indeseable, o inalcanzable. Se hace conmigo la nostalgia y se me contagia la humedad que desprende el inconsolable cielo. Grisácea Barcelona no me llores tanto. Mis huesos son un quejido, mi piel desvela las pequeñas agonías que escondo tras la chispa de mis pupilas y que mis labios jamás osarían escupir. ¿ Qué le voy a hacer ? Siempre me gustó jugar al escondite. Aunque todavía no sé si la meta del juego es seguir siempre escondida o que encuentren mi paradero, cuanto antes mejor.




lunes, mayo 10, 2010


Pupilas que escuecen, humo que duerme, ¡vuelo, vuelo!
Piel deja de enrojecerte, deja de quejarte, deja de aullar, deja de morir. Algún día estarás sana, lejos de una contaminación imperialista, expansionista, lejos de un aire que te desgarra. Lejos de unos brillos que te seducen y te violan. Te alejaré de la intangible maldad del efímero enemigo, ¡correremos lejos! Sólo te imploro que dejes de arañarme, quiéreme aunque me pierda en el frenesí de la existencia ¡oh, por Dios! no me abandones, ¡todavía no!


Ojos hidrópicos creo

que mis ojos deben ser;

pues cuando es muerte el beber,

beben más, y desta suerte,

viendo que el ver me da muerte,

estoy muriendo por ver.


La vida es sueño
, Calderón de La Barca